Ambos tipos de diabetes se caracterizan por la elevación de la glucosa en sangre. Pero en la diabetes tipo 1 es una enfermedad que tiene que ver con nuestra inmunología, que son nuestras defensas, estos “soldados” en vez de defendernos, atacan las células del páncreas que producen insulina, de manera que en esta enfermedad no se puede controlar la glucosa en sangre porque no producimos insulina y es incurable. En la diabetes 2 el origen es la alimentación exagerada en carbohidratos por un largo periodo de tiempo, luego de varios años va agotando la capacidad del páncreas de producir insulina, llegando un momento que no se puede controlar la glucosa, pero si se corrige la alimentación, en la gran mayoría de casos se puede controlar e incluso revertir.

Lo que sucede es que cuando pasamos varias horas sin comer, como es el caso cuando estamos dormidos en la noche, la glucosa empieza a bajar en sangre. Para que no baje más de lo saludable nuestro hígado empieza a producir glucosa en la madrugada. Eso pasa en todos, con o sin diabetes. Pero en caso de diabetes 2, como todavía persiste la resistencia a la insulina, la glucosa que produce el hígado no se procesa con la suficiente velocidad y se eleva en sangre.

No existe. Lo que suele pasar es que la persona ya tenía diabetes 2 y no lo sabía. Tal vez valores de 150 – 200 mg/dL de glucosa, pero como la diabetes 2 es una enfermedad silenciosa que no presente síntomas importantes y como no se hacía un examen de sangre, no sabía que la tenía. Luego se le presenta algún problema que le causa una emoción muy fuerte y su glucosa, que ya estaba alta, se eleva aún más, llegando a 300 o más, entonces empieza a sentir síntomas, mareo, dolor de cabeza, visión borrosa, etc. va a realizase exámenes y recién en ese momento se entera que tiene diabetes 2, pero la enfermedad venía de mucho antes.

La glucosa es un alimento fundamental para nuestro cuerpo, si se queda en la sangre y no alimenta a nuestras células, lo que ocasiona que se empiecen a canibalizar, entonces empezamos a perder peso por falta de nutrientes. Esto pasa muchas veces porque nuestro páncreas no produce suficiente insulina. Su sugiere medir en sangre Péptido C.

No, si corrige su alimentación, la glucosa rápidamente se normaliza, pero es necesario que sea una dieta baja en carbohidratos y personalizada por un profesional de experiencia en el campo del Control y reversión de la diabetes 2.

Lo que se denomina en general "dieta sana" es lo que en realidad está enfermando al diabético tipo 2. Con esa alimentación, basa en el plato nutricional o pirámide nutricional, se eleva su glucosa y con el medicamento le bajan la glucosa, a veces mucho a veces poco. Lo primero que hay que corregir es la alimentación para evaluar si realmente es necesario el medicamento. Mayormente no es necesario.

Lamentablemente no, si estoy tomando medicamentos para normalizar la glucosa significa que mi glucosa se está elevando e inflamando mis órganos. Por eso al diabético cada cierto tiempo le cambian de medicamentos, por uno más “fuerte” que el anterior y/o luego de dan más de un medicamento, porque el medicamento ya no es suficiente. El medicamento solo maquilla los signos y síntomas, pero no soluciona el problema.

No, porque con cada comida se producirá una elevación de glucosa, que obligará al cuerpo a producir insulina, para tratar de compensar. Lo mejor son máximo 3 a 2 comidas al día, sin embargo, algunos pacientes tendrán que mantener más comidas.

Diabetes tipo 2 no es la progresión de la diabetes tipo 1, en realidad son dos enfermedades muy diferentes que solo tienen en común que en ambas se eleva la glucosa, de ninguna manera una es la progresión de la otra.